Artista: Luis Felipe Noé
* 1933 Buenos Aires, Argentina.
Curador: Fabián Lebenglik
Comisario: Sergio Baur
Organizador:
Dirección de Asuntos Culturales de la Cancillería Argentina
Conexiones
La obra de Noé, artística pero también teórica y docente; histórica, pero también absolutamente presente, forma parte central del arte argentino del último medio siglo.
En todo este tiempo ha participado e influido de manera directa en la vida cultural de la Argentina, también durante su exilio (a causa de la dictadura militar que ocupó el poder entre 1976 y 1983).
Desde que en la década del sesenta fundó e integró el grupo conocido como La Nueva Figuración o La Otra Figuración, hasta la actualidad, Noé pintó siempre desde un lugar y un tiempo que a su vez están inscriptos en su obra, formando parte de ella y produciendo una interdependencia entre las coordenadas del espacio y el tiempo; entre la obra y su contexto. La pintura es aquí una caja negra que transforma y contiene ese contexto. Las crisis y las tensiones del mundo y de la historia Argentina son tema permanente y constitutivo en la obra de Noé. De ahí también la manera en que el artista titula sus trabajos, con frases irónicas respecto de las paradojas de presente.
Así, las dos pinturas murales enfrentadas que componen esta exhibición, desde su propia materialidad, compleja y fragmentaria, expansiva y detallada, hacen de estas tensiones su tema. En ambas obras hay una articulación que logra multiplicar y politizar los sentidos a través de lo visual. Los murales de Noé, donde conviven multitudes de imágenes, en distintos focos de atención, a través de diferentes modos de pintar y deuna variación de escalas (de la miniatura a lo gestual, de lo puntual a lo sinfónico), suponen la asunción crítica del caos como principio creativo y de coexistencia.
Sus obras son una pura tensión de sentidos y una forma de transformar el conocimiento en pintura y la pintura en un modo de conocimiento del mundo. Los dos murales de Noé, devoradores e inclusivos -que revelan la energía de uno de los artistas más expansivos y vitalmente jóvenes de la Argentina actual-, funcionan como redes que convocan, atrapan, muestran, construyen, proponen, discuten el estado del mundo.
En este tiempo de desconciertos globales, la obra de Noé aporta la mirada lúcida y los cuestionamientos de un gran artista.
Fabián Lebenglik, curador