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Arte y cultura visual en México 1968-1997. Foto recorrido por la exposición, presentada actualmente en Buenos Aires.
jun 2008Esta enorme exposición fue concebida para el Museo Universitario de Ciencias y Arte (MUCA) de la UNAM en la Ciudad de México, en donde fue presentada entre marzo y septiembre del 2007. Una versión más reducida, con unas 170 obras, puede ser vista en el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA) del 20 de junio al 11 de agosto de 2008.
Como les sucederá a muchos otros interesados, lamentamos no poder ver esta importante muestra personalmente. Por ello nos alegra de sobremanera poder presentar aquí por lo menos algunas impresiones fotográficas de la misma, lo que fue posible gracias al apoyo del MALBA, pero sobre todo por las fotos de Kathy Binder, la intercesión de Cuahtémoc Medina, uno de los curadores de la Era de la Discrepancia, a los que expresamos aquí nuestro cálido agradecimiento.
Además de las fotos de la exposición en el MALBA, mostramos algunas tomas de la presentación en México, que ya nos había enviado el año pasado Olivier Debrois, también curador de la muestra. Dedicamos este recorrido fotográfico a la memoria de Olivier, que falleció repentinamente en mayo de 2008 sin poder ir a Buenos Aires, lo que le hubiera gustado tanto...
Pat Binder y Gerhard Haupt
Extracto del texto de prensa publicado para la inauguración de la exposición en el MUCA Campus en México, 2007:
A partir del 17 de marzo y hasta el 30 de septiembre, el Museo Universitario de Ciencias y Arte de Ciudad Universitaria (MUCA Campus) exhibirá la muestra
La era de la discrepancia. Arte y cultura visual en México 1968-1997, primera revisión histórica, académica y crítica, de las búsquedas artísticas que se produjeron en el último tercio del siglo XX en México.
A cargo de los destacados curadores Pilar García de Germenos, Álvaro Vázquez Mantecón, Cuauhtémoc Medina y Olivier Debroise, la exposición más que una panorámica de todas las corrientes y tendencias que emergieron durante estas tres décadas, pretende introducir cortes transversales para destacar momentos en que artistas de distintas generaciones y provenientes de horizontes culturales diversos se plantearon transformar formal o políticamente el sentido de producir arte.
La muestra destaca no sólo por las más de 300 obras - entre pintura, fotografía, escultura, cartel, ilustración, cine, video y documentos - que la conforman, sino por el esfuerzo de reconstrucción de obras destruidas y efímeras del periodo, en colaboración con los propios artistas. Entre ellas el Corredor Blanco (1969), de Helen Escobedo; Ambiente Alquímico (1970), de Marta Palau; Ambiente circular (1973), de Hersúa y Pentágono (1977), del grupo Proceso Pentágono. La reconstrucción estuvo a cargo de Tatiana Falcón, coordinadora del Laboratorio de Arte del Instituto de Investigaciones Estéticas (IIE) de la UNAM. Asimismo, fue fundamental la participación de otras instancias universitarias como TV UNAM y la Filmoteca en la obtención de los materiales documentales incluidos en el proyecto.
Interpelación de la legitimidad
El título de la muestra remite directamente a la declaración del rector de la UNAM, Javier Barros Sierra, que a poco más de un año de la matanza de Tlatelolco proclamaba: “¡Viva la discrepancia!” Opuesta a toda visión hegemónica de cultura, la frase de Barros Sierra resultó la más apropiada para describir una era donde, a pesar del desprecio del establishment, los productores visuales optaron por el disenso creativo con una intensidad difícilmente comparable a otro sector de la cultura.
La exposición se centra en artistas en desacuerdo con los usos tradicionales del arte y autocríticos de sus propias prácticas, lo que los llevó a interpelar tanto la legitimidad de los soportes tradicionales como las funciones históricas del arte y la iconografía generalizada de su sociedad.
A decir de los curadores, estas modalidades artísticas se analizan en un periodo particularmente significativo de la historia mexicana, las últimas fases del régimen del PRI, enmarcadas por un lado por el Movimiento Estudiantil de 1968, y, por el otro, la crisis política y social de mediados de los noventa, que culminó con el levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en el estado de Chiapas en enero de 1994 y la crisis política y social del país en 1995. Estos dos episodios políticos enmarcan un periodo excepcional en la cultura mexicana, que a diferencia de lo que ha ocurrido en otras regiones de Latinoamérica, aún no ha sido explorado de modo general y sistemático.
En este sentido,
La era de la discrepancia... busca replantear la memoria de un momento decisivo de la historia visual en el continente americano, a fin de brindar nuevos puntos de partida a futuras investigaciones. Punto crucial del proyecto es la edición de un libro de casi 500 páginas que brinda un primer repaso de la historia artística reciente del país.
La genealogía del arte mexicano actual
La era de la discrepancia... se despliega en diversos planos curatoriales y un espacio documental para presentar una genealogía del arte mexicano actual, valorado recientemente a nivel mundial. De hecho, la muestra busca dar profundidad histórica e intelectual a una clase de experimentación visual que tiene cada vez mayor circulación entre los públicos del arte de la era global. La primera sección de la exposición se articula en torno al
Salón Independiente (SI), organizado por un grupo de artistas quienes, en reacción a la política gubernamental, optó por separarse de las actividades artísticas oficiales del Estado y apostar por una reforma de la escena pública en torno a la independencia cultural.
La segunda sección,
Mundo Pánico, está dedicada a formas de contracultura que, hasta hace poco, no eran consideradas expresiones artísticas relevantes, aun cuando fueron ampliamente discutidas en el mundo cultural mexicano, como en el caso particular del “Movimiento Pánico” fundado en París en 1963 por el polémico dramaturgo, actor y cineasta de origen chileno Alejandro Jodorowsky. Esta sección mostrará obras de diversos géneros, incluido el cine, cómic, la edición de revistas, el ensamble y el dibujo.
Sistemas, la tercera sección, pretende poner en cuestión el concepto de “geometrismo mexicano” para mostrar que a principios de los años setenta se manifestó una serie de formas de producción artística basadas en la experimentación, combinatoria y serialismo, derivadas de la conjunción del estructuralismo, de los avances de sistemas cibernéticos, de las nociones sobre lo aleatorio introducidas por John Cage y del gusto por las permutaciones poéticas como las desarrolladas por los escritores franceses de la Nueva Novela. En ese sentido se propone aquí una lectura de obras conocidas de Vicente Rojo, Manuel Felguérez, el argentino-japonés Kazuya Sakai y de Hersúa, entre otros.
La cuarta sección,
Márgenes Conceptuales, está dedicada al desarrollo de formas de arte no-objetual, generalmente relacionadas con la aparición del arte conceptual. La sección presenta las colaboraciones de Felipe Ehrenberg y Martha Hellion con la rama británica de Fluxus a principios de los setenta, en el contexto de la editorial Beau Geste Press, así como las actividades de Ulises Carrión en Ámsterdam y su labor de teórico, archivista y productor de libros de artista así como la construcción de circuitos culturales marginales en torno al libro en México a finales de los setenta.
Estrategias Urbanas, quinta sección de la muestra, busca revisar el fenómeno de Los Grupos organizados a partir de mediados de los setenta como poropuestas de activismo estético. La muestra hace énfasis en el carácter experimental urbano de varias de esas agrupaciones.
Intitulada
Insurgencias, la sexta sección puntualiza la importancia de la fotografía documental en la creación de un nuevo imaginario de oposición social y política de los años 70 y 80, en su ambición de hacer la crónica visual del conflicto político y social de la época, desde las guerras de guerrillas en Centroamérica, a la formulación de un inventario de agentes sociales (movimientos urbanos, identidades sexuales, grupos indígenas) que parecían reemplazar a la clase obrera como sujeto revolucionario para la izquierda.
La sección
Identidad como utopía, plantea una revisión de los años 80 como un periodo de profundas transformaciones de las funciones del arte y, muy en particular, de los mitos de identidad sexual y cultural. Incluirá una revisión de las obras que plantearon localmente la crisis de la modernidad, y la emergencia de una crítica de la identidad nacional, a la par que del surgimiento de un imaginario feminista y de identidad gay.
El título de la sección
La expulsión del paraíso se inspira en una obra que Silvia Gruner elaboró en 1993 en el antiguo Convento de Tepoztlán que resume un breve momento en que en México una multitud de artistas confluyeron en la creación de un imaginario utópico e histórico americano. Se trató de un momento que desafió el universalismo de la cultura occidental y se planteó engarzar el arte con la revisión de la historia postcolonial y el imaginario indígena.
Finalmente, con la última sección,
Intemperie la muestra explora el origen de las prácticas contemporáneas en México, bajo la noción de la creación de un arte “desprotegido” de convicciones predeterminadas. La sección traza la crónica de un momento de reinvención del sentido del arte y de exploración de vías de expresión de un objeto social anómalo. Finalmente, esa muestra deriva en las obras que reportaron la crisis social y política nacional posterior a 1994.
La exhaustiva investigación académica y de campo de
La era de la discrepancia... obtuvo la beca del Programa de Apoyos a Proyectos de Investigación e Innovación Tecnológica de la UNAM, destinada a la formación de un fondo documental que será depositado en el IIE (8 mil documentos y 16 mil imágenes de archivos de artistas, coleccionistas, curadores, galerías y centros culturales y la recopilación de 100 horas de entrevistas a 50 protagonistas de la escena cultural).
La era de la discrepancia.
Arte y cultura visual en México 1968-1997
Curadores:
Olivier Debroise, Pilar García de Germenos, Cuauhtémoc Medina, Álvaro Vázquez Mantecón
20 de junio -
11 de agosto 2008
Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA)
17 de marzo -
30 de sept. 2007
Museo Universitario de Ciencias y Arte
(MUCA Campus)
Ciudad Universitaria
México, D.F.