Colección Teotihuacán Berlín
Una selección de objetos de la extensa colección del Museo Etnológico de Berlín.
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San Rodrigo Aljojuca, distrito de Chalicomula, 150 - 650 d.C.
Altura: 12 cm; ancho: 17,5 cm;
profundidad: 10,4 cm
Col. Seler, 1912
No. Ident. IV Ca 35750
Staatliche Museen zu Berlín, Museo Etnológico
La vasija en forma de armadillo forma parte de las cerámicas conocidas como naranja fina. La primera descripción de piezas tipo naranja fina procede del mexicanista berlinés, Eduard Seler (1849-1922). En su ensayo Die Teotihuacan-Kultur des Hochlandes von Mexiko (La cultura de Teotihuacan del altiplano de México), 1915, las describe así: "Son unas piezas finas y livianas de paredes muy delgadas y muy cocidas, de color amarillo pálido, manufacturadas en algún lugar muy especial y diseminadas a través del comercio." Seler supone que el cacharro proviene de Huauchinango (Puebla) (Seler 1915:501), donde vivía el coleccionista Honorato J. Carrasco, de cuya colección Seler obtuvo la pieza.
Seler adquirió el armadillo en su último viaje a México (1910/11), año en el que participó del Congreso Internacional Americanista en México y en el que fue docente en la Escuela de Arqueología y Etnología Americana. Desde la capital mexicana, Seler emprendió varias excursiones, entre otras, a Teotihuacan y a Tepexi.
Hoy en día se sabe que la arcilla para esta cerámica se extraía en la región de Tepexi al sur de Puebla. Además de las delicadas vasijas figurativas de naranja fina hay también objetos cotidianos más sencillos. Las investigaciones de Carmen Cook de Leonhard y Evelyn Rattray demuestran que la naranja fina era la cerámica predilecta para el comercio y que su difusión puede considerarse como un indicador importante de la influencia de Teotihuacan en Mesoamérica.
© Foto: SMB / Claudia Obrocki
Una selección de objetos de la extensa colección del Museo Etnológico de Berlín.